La verdad es que no puedo saber si esta carta de Tom Hanks al oscarizado George Roy Hill despertó el interés del director hacia el actor californiano. Pero probablemente le habría ido al dedo algún papel protagonista a Tom Hanks, tal vez en El mundo según Garp, que con la buena estrella que siempre ha tenido Hanks podría haber funcionado mucho mejor.
Lo cierto es que la misiva está escrita con toda la intención en un tono cómico, con una fina ironía muy del corte de las películas del director «Mr. Hill». En ella le pide directamente una oportunidad, pero no para cualquier papel, lo que Tom Hanks decide que quiere ser es una estrella. Es más, concreta irónicamente qué tipo de estrella quiere ser, qué quiere tener y cómo quiere vivir. Una de las razones de su éxito es que él sabía quién quería ser y cómo sería su vida según sus deseos. Es tal la confianza que destila y el optimismo que desprende que podemos imaginarnos al propio Hanks leyendo la carta en voz alta frente al espejo y haciéndonos reír.
Sentados en un sofá pasa la vida y caducan las ilusiones. Es tomando acciones, que aunque puedan parecer locas como la iniciativa de Tom, como la vida da un giro emocionante y todo ya son razones para estar vivo.
Sentados en un sofá pasa la vida y caducan las ilusiones. Es tomando acciones, que aunque puedan parecer locas como la iniciativa de Tom, como la vida da un giro emocionante y todo ya son razones para estar vivo.
Un enlace a la traducción al español: