Hace unos días celebró su setenta cumpleaños quien llegó a revolucionar el cine en blanco y negro. “Si además fuese capaz de actuar…” Esto fue lo que pensó Stanley Kubrick al decubrir a una joven Sue Lyon que hasta ese momento sólo había actuado en anuncios y poco más. Kubrick estaba adaptando la novela Lolita al cine, y quedó atrapado como Humbert Humbert por la actriz.
Antes, la vida de Sue Lyon no había sido fácil. Su madre enviudó, y tuvo que mudarse a Los Angeles y sacar adelante a sus hijos. Cuando llegó la oferta de la película dudó si era éticamente aceptable un papel así para una adolescente, lo consultó con el pastor de su iglesia y este dio su aprobación. Así nació Lolita, que revolucionó a la industria de Hollywood durante unos años, para después caer en el olvido. Muchos matrimonios, el suicidio de un hermano, un accidente de tráfico… y un carácter muy difícil, que pronto fue conocido en los rodajes. Se quedó al margen, y ella culpó a esa primera película que la lanzó al estrellato: “Mi destrucción como persona proviene después de Lolita. Esa película me expuso a tentaciones a las que ninguna niña debería ser sometida.»
Y no es el único caso, otros tantos niños prodigios lanzados por la industria del cine lo han pagado de forma astronómica. ¿Es posible que sus padres o tutores no fuesen conscientes del entorno adecuado para un menor por desconocimiento? ¿Quizás proyectemos demasiadas expectativas en nuestros hijos por vocaciones frustradas? ¿Qué cuesta una vida en comparación a unos minutos de reconocimiento? ¿QUÉ CUESTA SER FELIZ?
Posiblemente, la difunta madre de Sue Lyon tuviese una visión distinta a toro pasado. Pero, ahora dispones de una nueva oportunidad para escuchar qué transmites a los demás, qué palabras salen de tu boca dirigidas a tus hijos o sobrinos, porque todos ellos como una lapa cantábrica se aferrarán a tus valores y comportamiento.
Nadie se acuerda de Lolita, hace unos años el destino le otorgó el anonimato y el ingreso en un psiquiátrico, quizás ya no escuche voces que aclamen su atención. Ahora es posible que disfrute de la paz entre la naturaleza del jardín.